La Quiropráctica es una profesión sanitaria de primer contacto que se encarga del diagnóstico, tratamiento y prevención de las alteraciones mecánicas de la columna vertebral en particular y del sistema neuro-musculo-esquelético en general. El quiropráctico diagnostica y corrige posibles disfunciones articulares en LA COLUMNA VERTEBRAL, refiriéndose a estas como subluxaciones vertebrales, fijaciones o restricciones articulares con posible impacto neurológico como demuestran los estudios de neurofisiología articular, y en consecuencia posibles alteraciones en el equilibrio o la capacidad de homeostasis del cuerpo. Al corregirlas, el objetivo sería estimular la capacidad fisiológica del organismo. Todo esto se enfoca en la estrecha relación entre EL SISTEMA NERVIOSO, COLUMNA VERTEBRAL y SALUD, entendida esta última, como un estado de bienestar bio-sico-social según la OMS. (Definición oficial proporcionada por la Asociación Española de Quiropráctica AEQ)
El sistema nervioso central está compuesto por el cerebro y por la médula espinal. Y de esta última, sale todo el cableado eléctrico, conocido como «nervios«, que se distribuyen hacia todas las partes del cuerpo: órganos, tejidos, músculos, etc.
La columna vertebral protege nuestra médula espinal y su conexión con el cerebro. Algunas malposiciones vertebrales son capaces de crear interferencias en la comunicación cerebro-cuerpo, es decir, haciendo que el cerebro no sea capaz de hacer bien su trabajo, que cometa errores, que funcione peor. Estos errores perjudican nuestro bienestar y salud.
¿Qué causa estas interferencias?
La sobrecarga de información, es decir, el estrés mal gestionado. Hay tres tipos de estrés: Físico, Químico y Emocional, por separado o combinados entre sí.
La quiropráctica te ayudará a eliminar estas interferencias, llamadas subluxaciones vertebrales, para que disfrutes tu vida con más energía y bienestar. La quiropráctica ayuda a proteger y a restablecer la comunicación interna, incluso antes de que se perciban los síntomas.
El cerebro es el jefe de nuestro cuerpo y, con un sistema nervioso funcionando y rindiendo al 100% todo nuestro cuerpo trabaja mejor. Si tu cerebro recibe todo el riego posible, podrás vivir conectad@ a tu entorno y adaptándote a las circunstancias de la vida con más serenidad emocional y capacidad de resistencia al estrés. Tu organismo no se ralentizará con la edad y podrás añadir más vida a tus años.