Si ya estás decidido/a a hacer una primera visita:
Tu visita inicial constará de cuatro partes, por eso siempre es más larga que todas las demás.
Tu entrevista:
Tenemos un espacio reservado exclusivamente para ti durante el cual realizaremos un historial exhaustivo para conocerte, a ti y el motivo de tu visita; de esa forma podremos guiar mejor nuestra examinación.
Tu examen:
Realizaremos unas pruebas destinadas a evaluar objetivamente la calidad del control de tu columna vertebral y el funcionamiento del sistema nervioso central. Estas pruebas servirán de referencia para compararlas con tus evaluaciones periódicas y nos ayudarán a personalizar el cuidado que necesites.
Tu informe:
Durante este primer contacto compartiremos contigo los resultados de tu evaluación quiropráctica y lo qué la quiropráctica puede hacer por ti. Te recomendaremos un plan de visitas y unos hábitos para una recuperación óptima.
Primera sesión quiropráctica:
Si lo eliges, después de todo el examen y tu informe, podrás iniciar el cuidado ese mismo día, siempre que tu quiropráctico lo considere adecuado.
Al finalizar cada fase de cuidado, realizaremos una reevaluación la cual concluirá con una nueva recomendación incluyendo la frecuencia de visitas y unas directrices para guiarte en la mejoría de tus hábitos.